Para las personas que tienen un coche, uno de los grandes dolores de cabeza es el combustible. Conocer algunos trucos generales nos puede dar una pauta de qué hacer para que el ahorro de combustible sea mayor y por lo tanto el gasto mensual disminuya. Suelen ser hábitos que si los aplicas en conjunto notarás la diferencia rápidamente, mucho más cuando tienes que hacer viajes largos.
Acciones para ahorrar combustible
Hay muchos mitos acerca de qué es lo que hace que haya un mayor gasto de combustible. También de que hay ciertos vehículos que consumen más que otros. Independientemente del tipo de coche que tengas, la realidad es que estas acciones o trucos se pueden aplicar en cualquiera de ellos.
Se trata principalmente de tener unos buenos hábitos al volante que ayuden a que el combustible perdure por más tiempo y que se gaste lo justo y necesario en cada tramo.
Evita realizar aceleraciones
¿Cuántas veces te has visto en una incorporación o en un semáforo que se está por poner en rojo y le has dado un chute de aceleración? Esa acción que realizas es la que hace que el gasto de combustible sea mayor. Dicen los expertos que una aceleración de forma agresiva podría llevar a un gasto de un 30% más de combustible que el uso habitual del mismo.
Eso sucede porque el motor necesita un mayor gasto energético y por lo tanto para hacerlo, un mayor consumo de combustible. Cuando tengas que acelerar por ejemplo porque vas a adelantar a un vehículo, ve acelerando poco a poco. Así el motor no tiene ese gasto adicional inesperado.
Mantén la distancia con los vehículos
Si mantienes la distancia adecuada con el resto de los vehículos, vas a poder anticipar la forma de conducir. Esto es algo que sucede mucho cuando hay un atasco, en donde hay que ir bajando la velocidad. Si estás muy pegado al vehículo, lo que harás es frenar continuamente el motor y en el nuevo arranque es cuando va a consumir más combustible.
Podrías en varios casos aprovechar la propia inercia y por lo tanto, quitar el pie del acelerador y que el coche vaya bajando su velocidad poco a poco.
Utiliza correctamente la caja de cambios
Cuando la caja de cambios no se utiliza adecuadamente hay un gasto mayor del combustible. La primera marcha siempre hay que utilizarla para arrancar el vehículo, en los primeros metros o en los casos en que tengas que salir de una pendiente. Cada vez que te sea posible, cambia a las marchas más largas, eso si el motor no va a perder nada de potencia.
Lleva la carga necesaria
A veces nos acostumbramos a llevar muchas cosas en el maletero “por si acaso”. Eso lo único que hará será que el motor del coche, tenga que hacer un esfuerzo mayor para trasladar todo ese peso.
Revisa muy bien qué es lo que llevas y únicamente coloca en el maletero lo imprescindible. Ten en cuenta que cada 100 kg adicional hay un gasto de un 5% más de combustible.
Uso del aire acondicionado
No es una novedad que el aire acondicionado hará que haya un consumo más grande de combustible. Siempre que puedas, evitar hacer uso del mismo para que no haya un consumo mayor. Puedes por ejemplo hacer que el vehículo se ventile de forma natural o dejar que entre un poco el sol durante la época de invierno.
No aceleres en las pendientes declinadas
Una forma de ahorrar combustible conocida por todos es hacer uso del impulso en las pendientes declinadas. Cuando vas con la marcha puesta a una velocidad de unos 20 km/h, no hace falta acelerar. La propia inercia hará que el vehículo en la pendiente vaya cada vez más rápido. Por lo tanto, el consumo de combustible será menor porque la bomba no llega a inyectarle. Así es como vas a ahorrar cuando estés bajando con tu coche.
Reduce la velocidad
A medida que aumentamos la velocidad, necesitaremos más combustible. El cambio es trascendental cuando superas los 100 km/h. Entre circular a 80 km/h e ir a 120 km/h puede haber una diferencia de más de un 50% en el consumo. Por lo tanto, está claro que ir a gran velocidad es más costoso que ir a una velocidad de 80 km/h fija.
Cuida tus neumáticos
Los neumáticos son una parte fundamental para que el vehículo funcione a la perfección. Y dentro de la influencia que tiene, también está presente el hecho de que llega a cambiar el consumo de combustible que hace el vehículo. Esto quiere decir que si los neumáticos no tienen un buen estado de conservación y la presión adecuada, consumirán mucho más combustible, además de ser un riesgo para cualquier conductor. Existen los llamados neumáticos ecológicos que ayudan a reducir en un 3% el combustible utilizado en cada viaje.
